manocruel ©

9.11.05

R.I.P.

mi alter ego murió un nueve de noviembre de 2005, cumplidos los 4 años.
pero su muerte no debe ser entendida como una tragedia, sino como un devenir natural, habida cuenta que sus años se cuentan de a siete, como los perros.
parece que se cansó de su ir y venir por la vida perruna, alimentado a desperdicios y sobras, errando a la intemperie, marginado y sólo, como cualquier bicho que camina, vuela, nada o se arrastra.
debo mencionar que tuvo una muerte tranquila, elegida. cansado como estaba, se dejó ir mientras dormía.
en vida supo ser cruel, característica que no podemos reprocharle, de la misma manera que a un león no puede reprochársele el querer matar a una gacela, porque nació para eso, era su obligada contribución al equilibrio natural de las cosas y él mismo así lo entendía.
salvo un servidor, no dejó otra descendencia ni herederos y, contra su voluntad, alcanzó a cosechar algunas amistades, aunque es natural que no hayan venido a despedirlo.
es verdad que flaqueó muchas veces, y fue tierno, sensible y hasta amoroso, dejando entrever su profunda necesidad de ser querido, porque hasta las serpientes necesitan afecto.
en sus últimos días, consciente de la inminencia del final, exigió expresamente que no se llorara por él, porque entendía que (además de tenérselo merecido) cualquier final entraña la certeza de un comienzo.

no se culpe a nadie.

sus atormentados restos ¿descansarán? AQUÍ